Piezas intercaladas, en las que vuelvo a entrelazar quién soy, raíces que vuelven a su origen. Ésto es para ti, para nosotros
jueves, 25 de febrero de 2016
No tenemos un lugar común (Birdman)
No tenemos un lugar común, ninguno espera al otro, y nadie sabe dónde van demarcándose las pisadas del otro. Tal vez el amor está acariciando tu viaje, yo me limito a mirar el sol cuando está a punto de apagarse. Todo es tan perfecto cuando no estamos presentes. no te veo, y probablemente si lo hago, será metódico, será casi un soliloquio de mi parte. Ahora, cuando mis manos sostienen mi cara y mis ojos debilitados, me pregunto qué sentido es todo lo que soy, todo lo que escribo, todo lo que pienso en éstas dramáticas horas.
Mi última parada es aquí, sin embargo tu embarcación está en stand-by.
Quiero saber qué quieres, dónde quieres ir, pero sé que sería como arrebatar las aves del cielo, ellas, tiernas y libres, nunca saben su destino, y estoy segura que ese es el verdadero sentido, la forma de vida en que te dejas fluir, te dejas ser parte.
Todo ésto es el reflejo de lo que anhelo, y que veo en ti cada vez que caminas, o que cuentas sobre tus utopías.
Las palabras que dije se quedan como fósiles, no, no me arrepiento, eres la mejor sensación, la mejor terapia para sentirme parte de mi misma.
No quiero sentirme anfitriona de nada, no quiero poseer ni ser la dueña de lo más caro, quiero ver crecer la hierba de mi alrededor,y verte tirado mirando las nubes.
Soy la parte que está intentando formar la obra completa, un rompecabezas hecho a medida que está en proceso, por eso no pido, por eso me quedo quieta y no hablo. No, no necesito a nadie. Necesito amar mis contradicciones, la forma en la que me desespero por el tener el control de mi propia gravedad, la forma en que cambia mi cuerpo.
Eres el amor que en la vida alguien puede desear, y lo vivo, lo vivo cuando te imagino, de aquí para allá, revoloteando por los lugares más vírgenes.
Quiero quedarme sentada sintiendo la lluvia, sin pensar, sin tener planes, sin ahorrar energía, tiempo, o dinero; quiero una pausa verdadera.
Mi última parada serás tú, no ahora, y tal vez nunca, pero después de la gran obra, cuando las piezas sean dueñas de si mismas, cuando la voz sea intachable y dulce, cuando el cuerpo sea lo más dulce antes del desayuno. No, no te espero, y tu tampoco, pero juraría que todo fluye en la dirección correcta incluso cuando vemos que va en reversa.
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